jueves, 4 de noviembre de 2010

Jueves, 4. (III) “Yo no te espero”.



Caminho a Teu. Camiño a Teo.


Las caras del laicismo catalán. De izda. a derecha: Jordi Giro, representante vecinal; Toni Mallorques, de Ateos de Catalunya; Francisco Martínez y Sonia Turón, de CNT; Montse Pineda, de Ca la Dona; Marta López, de Casal de Joves de Catalunya; Fidel González, de Lliga per la Laïcitat; y Joffre Villanueva, del Movimiento Laico y Progresista. JOSÉ COLÓN.


En la plaza Sant Jaume de Catalunya, se concentran hoy más de 50 colectivos anti Papa. Pretenden responder al viaje “pastoral” y a la provocación de Benedicto XVI a Galicia y Catalunya por el que las arcas públicas españolas abonarán más de seis millones de euros. Según Joffre Villanueva, secretario general del Moviment Laic i Progresista, la campaña lleva el lema “Jo no t‘espero” y se ha ideado “de una manera muy plural para hacer evidente la diversidad de morales” que hay en la sociedad. Se creó también una web que da a conocer su manifiesto (www.jonotespero.cat) y reparten carteles, pegatinas y pancartas con el logo de la campaña para que los ciudadanos puedan mostrar su disconformidad desde sus balcones. En la red, se ha organizado una besada gay, censurada por Facebook, para cuando Benedicto XVI pase por las calles de Barcelona en su vehículo, el próximo día 7 de noviembre. Dichos colectivos reprochan “la actitud entreguista del Gobierno socialista”, que da “todos los privilegios y facilidades” a la visita papal, y que ha metido en un cajón la Ley de Libertad Religiosa para no molestar o perturbar las relaciones con la Iglesia. “Como ciudadano –dice Rosario Segura, de Europa Laica– el Papa puede venir cuando quiera a ver a sus fieles, pero una democracia real no puede quedar subsumida por una religión específica, y eso pasa con la teatralización que se hará del viaje. Habría que cuestionar el papel de las autoridades españolas, que se pelean por estrechar la mano o hacerse la foto con el Papa”.

Rosario Segura dice que “los obispos se pueden manifestar contra el aborto, pero lo que resulta inadmisible es que cuestionen la capacidad legislativa del Parlamento o no respeten las instituciones democráticas. Eso es un riesgo para la esencia de la democracia”. Y concluye que una cosa es respetar las creencias y otra, que los espacios públicos se llenen de todas las religiones, sin respetar los derechos de los ciudadanos. Para Antonio González Boldo, de Madrid Laica, el coste de la visita resulta especialmente hiriente en el actual contexto de crisis. “Hay recortes a los trabajadores, a los funcionarios, a los pensionistas, a todos menos al Papa, para el que se ponen todos los medios al servicio del viaje”.

Otras organizaciones han llegado incluso hasta los tribunales. Esculca (Observatorio para la defensa de los derechos y las libertades) interpuso en un juzgado santiagués un recurso contra las medidas operativas y de seguridad que se efectuarán en el casco histórico, mientras que Mulheres Transgredindo presenta su particular ofrenda al apóstol: una denuncia contra Joseph Ratzinger por “apología del genocidio y delitos de lesa humanidad”, en referencia a los “abusos sexuales a menores y su encubrimiento, apología de la misoginia y la homofobia”, así como “persecución por motivos políticos, étnicos, de género o de orientación sexual”.

Mañana: (IV) “Pasa la factura al Papa”.

1 comentario:

Anónimo dijo...

yo tampoco.

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