jueves, 29 de marzo de 2012

Un 29-M, sin miedo.




Hoy se celebra la huelga general contra las políticas antisociales de los gobiernos del Partido Popular y Convergència i Unió. El derecho a la huelga está recogido en la Constitución, pero a ciertos empresarios y a parte de la Iglesia Católica nunca les ha gustado y luchan contra ella para que se convierta en el más estrepitoso fracaso de los sindicatos convocantes. De ahí el que no pocas empresas ejerzan diversos grados de presión para evitar que sus empleados la secunden. Y de ahí la necesidad de los piquetes informativos como medio de contrarrestar en lo posible estas amenazas.

El abuso de poder de empresarios y jefes es silenciado por los trabajadores que tienen miedo de perder sus puestos de trabajo, y más en momentos de crisis como el actual. Para denunciar estos chantajes por parte de las empresas, se creó hace unos días la “29-M Sin Miedo”, (http://29msinmiedo.tumblr.com/) una web que ofrece un listado completo y público donde se pueden ver las empresas que amenazan a sus empleados para que no acudan a la huelga. Mediante un formulario totalmente anónimo, los trabajadores inscriben la empresa que abusa de su poder y cohíbe a sus empleados, ofreciendo tanto el nombre, el municipio donde se encuentra y otros datos, por ejemplo. el procedimiento de amenaza que emplean.



Antonio Algora, obispo de Ciudad Real y responsable del sostenimiento económico de la Iglesia.EFE ÁNGEL DÍAZ.



Por otra parte, algún obispo, como el de Bilbao, Mario Iceta, censura un documento de pastoral obrera a favor de la huelga general. Iceta ha prohibido a su Secretariado diocesano de pastoral obrera que firme el documento a favor de la huelga general de hoy, 29 de marzo. Y trata de plasmar la misma dinámica pastoral del cardenal Rouco en Madrid. Consiste en que la Iglesia sólo habla de familia y vida y se olvida y guarda silencio ante cualquier tema social. Pero el documento fue firmada por la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC) y por la Juventud Obrera Cristiana (JOC) de Bizcaya. “Creemos –dice el manifiesto– que la huelga general es una oportunidad para reivindicar una concepción del trabajo humano como principio de vida, como elemento humanizador que procure la satisfacción de las necesidades materiales, culturales y espirituales de la persona. Una oportunidad también, para que las personas trabajadoras busquemos alternativas a un sistema capitalista que ha impuesto una cultura de la producción y el consumo que nos mantiene permanentemente insatisfechas”. En la información se indica que la diócesis de Bilbao ha digerido mal las prohibiciones de su prelado. Y se argumenta que el documento es “ecuánime” y “basada en la Doctrina Socia de la Iglesia”, además de que ha sido apoyada por todos los sindicatos vascos.

Otros, como Antonio Algora, obispo de Ciudad Real, critican la reforma laboral. Entiende el prelado que la nueva norma aprobada por el PP rebaja “claramente” los derechos de los trabajadores y busca establecer un mercado de trabajo en el que los empleadores hagan y deshagan a su antojo. Monseñor Algora hace estas reflexiones en una carta titulada “A vueltas con la reforma laboral”, publicada en la revista “Con Vosotros”. Y añade: "Parece mentira que, a día de hoy, tengamos que echar mano de usos del pasado que trajeron tanta injusticia y explotación a los trabajadores”. Algora dice que, “si no queda más remedio que aplicar hoy estas medidas, ¿no han de ser complementadas por otras en las que lo central sea la vida de las personas? ¡Tantos avances tecnológicos para esto! Da la impresión de que las sociedades desarrolladas van a ser las que más poder concentren en menos manos, y esto no se corresponde con las aspiraciones de una sociedad democráticamente avanzada”. El obispo lamenta: “No sé si es muy descabellado pensar que, en el río revuelto de la crisis, están pescando los más poderosos sin contar con la opinión de la sociedad”.



Por otra parte, Elena Montes Macías, Directora General de Fundador Kill The Loop, que va hoy a la huelga, ha escrito una carta abierta en la que dice: “Sé que hay empresarios inteligentes y honestos, con conciencia, con sentido común, que reconocen que, gracias a sus empleados, ellos están donde están y que sobre todo, son conscientes de que si sus clientes o usuarios reciben menos salario y sus condiciones laborales son peores (ya que nadie consume más ni contrata más servicios si bajan sus ingresos o si tiene miedo a perder su trabajo), va a empeorar su situación también.

“Apoyar a la Huelga General, es defender también tus propios intereses, porque esta reforma laboral se volverá contra los empresarios, ya que disminuirá muchísimo el consumo. Quizá te alegre saber que vas a poder despedir con muchísima más facilidad a tus empleados y etcétera, pero también tenemos que tener en cuenta que todo eso también lo podrán sufrir tus padres, tus hijos, tu mujer o tu marido, tus familiares, tus amigos, y no creo que esto te parezca justo y te alegre. Incluso, tú mismo dentro de unos años quizás ya no seas empresario y tengas que ser un trabajador más...

“Ser empresario no significa no tener humanidad, y ya es hora de romper con los tópicos y no ser malas personas. Se pueden tener ambiciones y ser ético al mismo tiempo. Apoyar a que los trabajadores luchen por sus derechos, es algo bueno, y jamás deberían ser penalizados por ello. Y una cosa es segura, te ganarás el respeto y la admiración de tus trabajadores y de tus clientes. Y esto sólo puede traer cosas buenas: buenas críticas, mejor reputación, mejor rendimiento, mejor imagen, etc. Siembra y cosecharás.

Yo, como empresa, el día 29 de marzo, por la Huelga General:

• No abriré mi oficina e iré a la Huelga General.
• Estaré al tanto de las noticias, tanto por internet como por televisión o radio .
• Dejaré una respuesta automática en mi email por si algún cliente me escribe sepa mis motivos por el que ese día no podrá ser atendido. Sin embargo, estaré accesible vía teléfono móvil si alguien desea contactar conmigo por un motivo urgente.
• No iré a ningún restaurante, ni bar, ni iré de compras a ninguna tienda ni centro comercial, porque no quiero que nadie trabaje ese día para mí.

Y tú, ¿qué vas a hacer hoy?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Lo que más me ha impresionado hoy en Madrid es la estampa de algunos "sintecho" más a la intemperie que nunca al tener que desplazarse a un espacio más inhóspito y desconocido, para facilitar el paso de las muchedumbres. Hoy les tocaba permanecer en pie, como una forma de castigo y privación añadida. Se sentían más acorralados y excluidos que nunca, al ver amenazada su invisibilidad habitual. Quizá sean los únicos capaces de observar esta situación, desprovistos de cualquier asomo de componente ideológíco. El último reducto de una espiritualidad ancestral, próxima a la liberación del yo, y a la animalidad del ser, como forma de supervivencia.
En esa adecuación quizá radique la mayor respetabilidad del individuo.

chiflos.