jueves, 24 de agosto de 2017

Armas marca España para matar civiles.


Isabel León informó en la Cadena Ser Euskadi que, el Puerto de Bilbao ha enviado desde octubre 312 contenedores con “explosivos” con destino a Arabia Saudí. Según diversas fuentes consultadas por Radio Bilbao, cada contenedor tiene capacidad para 28 toneladas, lo que supondría que podrían haberse enviado 8.656 toneladas a ese destino en apenas diez meses. Greenpeace, dentro de la campaña "Armas Bajo Control", pide a las administraciones vascas que se pronuncien contra estos envíos y reclama al Gobierno central que deje de ser “cómplice” en la guerra contra Yemen.

Greenpeace, dentro de la campaña "Armas Bajo Control", que está realizando con Amnistía Internacional, FundiPau y Oxfam Intermon, ya advierte de que aunque el Gobierno central niega que esas armas se utilicen posteriormente en la guerra contra Yemen, “podría ser cómplice y por tanto ser acusado de crímenes de guerra”. Alberto Estévez, portavoz de Greenpeace, recuerda que España es el “tercer país que más armas vende a Arabia Saudí” y que “según los datos de exportaciones en los últimos años han aumentado de forma muy significativa, rondando los 4.000 millones de euros solo el año pasado”. Asegura Estévez que “España hace un papel de árbitro”. Dice que “si una empresa quiere exportar armas a Arabia Saudí u otro país presenta una petición ante la Junta Interministerial donde se analiza si esas exportaciones violan o no las normas internacionales y concede o no una autorización”. Eso supondría que las exportaciones, también en el Puerto de Bilbao, podrían responder a autorizaciones de años anteriores, de ahí que, según Estévez, “desde el inicio de la guerra, España haya exportado armas por valor de más de 650 millones de euros”.

Ahora mismo, mantiene  Greenpeace, el Puerto de Bilbao está también bajo su lupa, por ser en los últimos meses un punto de salida de estas armas. Denuncian que España “pueda estar siendo cómplice de la comisión de presuntos crímenes de guerra en Yemen” y, por tanto, consideran que “tiene que parar el suministro de este tipo de armamento a Arabia Saudí por el riesgo claro de que se estén utilizando contra la población civil de Yemen”. Greenpeace reclama a las administraciones vascas, “tanto a la Diputación, como al Ayuntamiento y al propio Gobierno Vasco” que se pronuncien contra estos envíos. Próximamente, además, no descartan acciones de control.